Introducción al conocimiento geográfico de Piornal (Cáceres)

 

Juan José Bermejo y Amparo Vega
http://web.usal.es/~casimirohh/Ruta%20Piornal.pdf

El municipio de Piornal está emplazado a 1175 m de altitud en el altiplano de la Sierra de Tormantos, en las estribaciones de la sierra de Gredos, del Sistema Central. Por su situación altitudinal se trata del municipio más alto de Extremadura. La mayor parte del término municipal se extiende por las laderas occidentales, hacia el valle del Jerte, comarca cacereña la que pertenece.

Linda con los términos de Garganta la Olla, Pasarón y Barrado por el Sur (municipios de la Vera) y con Casas del Castañar, Cabrero, Cabezuela y Navaconcejo por el Sudoeste, todos del Valle del Jerte.

Bien comunicado tanto con el Valle del Jerte como con la Vera, hoy sus habitantes necesitan poco tiempo para dirigirse a Plasencia a actividades comerciales o de ocio. A la vez, la fluidez del tráfico permite la ida o llegada en poco más de dos horas a Madrid u otros núcleos urbanos regionales o no, lo que está favoreciendo el auge de actividades turísticas rurales.

El paisaje es de gran belleza. Piornal es un auténtico mirador desde el que contemplar una impresionante vista del Valle del Jerte, cerrado por las estribaciones de la Sierra de Béjar coronadas por las nieves del Calvitero en invierno; si miramos a sudeste, divisamos toda la Penillanura del Tajo que comienza el la Plataforma de la Vera y finaliza en los Montes de Toledo, perfectamente visibles desde lo alto del término en los días claros y soleados.

Sus habitantes viven ocupados en la tierra y otras actividades, como el ganado, la industria chacinera, o los servicios, son meramente subsidiarios. Las condiciones climáticas favorecen los cultivos intensivos y cada día más una especialización en el monocultivo cerecero, del que vive la mayor parte de la población. El contraste social es pequeño, con un acentuado minifundismo. La población actual con poco más de un millar y medio de habitantes, está estacionaria, debido al bajo índice de natalidad.

La emigración, en otro tiempo importante, hacia el centro comarcal o hacia áreas más industrializadas de España o Europa, hoy se ha detenido. Hoy el pueblo vive un fuerte empuje económico. Los piornalegos han vivido un fuerte impulso socioeconómico en los últimos decenios del siglo XX por la buena acogida de la cereza en los mercados internacionales, comercializada con Denominación de Origen a través de la Agrupación de Cooperativas del Valle del Jerte.

A ello se unen ingresos por otras actividades agrarias secundarias (castañas, aceitunas, frambuesas,…), así como ciertos Fondos de Compensación llegados desde la incorporación de España a la Unión Europea. Por todo ello la población ha salido de la penuria y falta de medios que le obligó a muchos a abandonar su pueblo. En el 2008 era el pueblo con menos paro de Extremadura (un 1,5%) según datos publicados en el anuario de la Caixa

El Relieve: El macizo montañoso de Gredos pertenece al Sistema Central, levantado en el centro de la Meseta, por la orogenia terciaria alpina sobre el basamento paleozoico de antiguos macizos hercinianos. Forma un conjunto de bloques elevados separados por otros compartimentos hundidos mediante un sistema de fallas y fracturas. Las sierras de San Bernabé, Tormantos, Traslasierra, los valles del Jerte y Tiétar, no son más que un conjunto de horts y fosas tectónicas marcan los violentos contrastes que nos ofrece el paisaje. El terreno es predominantemente granítico en toda el área y los cuarzos, feldespatos y micas nos presentan una litología silícea, ácida e impermeable.

La acción de procesos geológicos internos y externos ha ido modelando el paisaje. Los cambios térmicos han roto las rocas y el agua helada ha favorecido un proceso de meteorización física y descomposición de las rocas que han acabado erosionadas y desgastadas por el agua, el viento, la nieve… El resultado es un paisaje berrocoso, con abundantes bolas graníticas más o menos diaclasadas y desgastadas, conocidas vulgarmente en el pueblo como "canchales" o "canchaleras"

Además, dada la fuerte pluviosidad de la zona y la abundancia de fracturas y fallas, junto la poca profundidad del suelo granítico (que no permite la acumulación de aguas en el subsuelo), son muy abundantes la red de pozos y fuentes, junto a los arroyos existentes.

Clima: Por su posición pantalla a los vientos húmedos del Suroeste se observa una precipitación superior a 1000 milímetros anuales, lo que incluiría a la zona en la Iberia Húmeda. Las precipitaciones en su mayoría se originan con las típicas situaciones perturbadas de Suroeste, que producen intensas lluvias acompañadas de temperaturas moderadas. Si la entrada de aire es del Norte, las precipitaciones son de nieve. El promedio es de unos 10,5 días de nieve al año, siendo febrero el mes de mayor innivación y sólo los meses de junio, julio, agosto y septiembre se libran de nevadas. La intensidad de precipitaciones recogidas, en relación al área geográfica en que se encuentra, se explica por el efecto pantalla de las sierras y el Valle del Jerte a los frentes atlánticos.

Las temperaturas están condicionadas por la altitud. La importante altura a la que está emplazado el pueblo justifica sus fríos en invierno, las intensas heladas y los frescos veranos. Pese a todo el emplazamiento a solana del núcleo urbano, al abrigo de los vientos fríos del Norte y Noreste, dulcifica un poco los días soleados de invierno, primavera u otoño.

Por la combinación de los diversos factores que determinan el clima de un lugar – latitud, altitud y distancia al mar- hacen que en el caso que nos ocupa de pueda habla de un clima mediterráneo, de influencia atlántica, degradado por la altitud. La suavidad de las temperaturas del verano y la presencia de espectaculares nevadas en otras épocas del año, son sin duda dos factores que influyen de manera decisiva en el turismo hacia este pueblo.

Vegetación: Dadas las características climáticas y topográficas la vegetación que encontramos es propia de una región montana. El arbolado es denso es las laderas bajas y medias y va diseminándose, hasta desaparecer por completo, en las partes más altas donde, por efecto de las bajas temperaturas, la innivación y los fuertes vientos predomina el matorral. Podríamos establecer los siguientes pisos de vegetación en el término municipal.

En la zona baja, casi fuera del propio municipio un piso arbolado de vegetación mediterránea- encinas y alcornoques, alternando con jaras y escobas. En las laderas medias la especie dominante es el rebollo o roble común, muy usado para obtener de él leña u hojarasca. En muchos casos el rebollo aparece reemplazado casi en su totalidad por cultivos arbóreos – cerezos, olivos, higueras, castaños-. Alternando con el rebollo en laderas más fresca y húmedas se encuentra el castaño, árbol muy característico en la zona y que por sucesivas plagas devastadoras han quedado muy restringido a pequeñas parcelas en el que se cultiva para explotar su madera y su fruto.

En las partes altas, sobre el piso de robles encontramos las retamas o montes bajos: brezos, escobas, helechos, cantuesos, tomillos… diseminados y salpicados por las rocas graníticas. A medida que se asciende a las partes más elevadas cada vez son más ralos, en beneficio de las gramíneas, herbazales de altura. Todos ellos muy aprovechados por el ganado caprino en verano.

También se dan los piornos, nombre vulgar de varias especies de plantas, en su mayoría papilionáceas, que pudieron ser el origen del nombre del pueblo (Piornal, como lugar en donde hay muchos piornos)

Hidrografía: Una de características de este pueblo, es la gran cantidad de fuentes y manantiales que se pueden encontrar en su término. Son fuentes de agua de composición silícea, poco mineralizada, libre de carbonatos y muy oxigenada. Citamos las fuentes de las plazas de la Iglesia, el Ayuntamiento y las Heras, la fuente Encima y otras, dentro del casco urbano, y la fuente de los Helechares, de Oliva Martín y Matafrailes, por mencionar algunas exteriores.. Tienen una enorme importancia económica como lugar de toma de agua para regar los numerosos espacios dedicados a una agricultura intensiva de regadío que sostiene huertos y espacios dedicados al cultivo de frambuesas.

Cuatro gargantas recorren sus tierras. Dos de ellas, la de Bohonal y la del Molinillo vierten sus aguas al río Jerte, mientras otras dos, la del Obispo y la Desesperá, lo hacen al río Tiétar. En la primera no podemos dejar de señalar la cascada de El Caozo, de notables dimensiones y El Calderón, piscina natural que da paso a otra espectacular cascada.

Aspectos socioeconómicos: Podríamos situar los orígenes de este pueblo a partir de la actividad pastoril allá por los siglos IX ó X. Su altitud genera unas condiciones climáticas que favorecen el pastoreo de verano, por lo que pudo convertirse en un paraje propicio para esta actividad, pasando luego a la ocupación continuada, a lo largo de todo el año.

Los primeros datos en los que aparece el nombre de Piornal, como aldea realenga con iglesia, aparecen en la Bula de Inocencio IV, del año 1254, aunque hay hipótesis de posibles asentamientos celtas, y aún anteriores, con restos de hachas de piedra recogidas en el término municipal. En este siglo XIII, también hay constancia documentada de que Piornal existe, en el "Libro de la Montería", en el que Alfonso XI habla de las bondades de la caza en este pueblo.

El tradición pastoril originaria se ha mantenido a lo largo de los siglos prácticamente hasta mediados de s. XX, cuando ésta es sustituida por las actividades agrícolas, que a partir de los años sesenta dejan de ser de subsistencia. Hasta esta fecha prácticamente todos los piornalegos tenían ganado, especialmente cabras, dato que contrasta con la situación actual, en la que apenas se da gente que no tenga cerezos, o que tenga cabras.

Socialmente estamos ante un grupo de carácter rural concentrado, que, hasta la mitad de este siglo era un núcleo esencialmente puro. A partir de estos años, comienza un proceso de transformación social, siendo uno de los elementos determinantes, las migraciones hacia los núcleos industriales del país y la transformación de la actividad agrícola de subsistencia por un modelo empresarial agrario de tipo cooperativo.

A partir de los años setenta se produce una expansión de los medios de comunicación de masa, mejoran los accesos al pueblo y el parque automovilístico dispara su número. En definitiva, socialmente Piornal ha avanzado, en estas últimas décadas, con una tendencia muy acusada a la semejanza con otros pueblos.

Piornal se ha caracterizado hasta fechas recientes por presentar una economía agraria de subsistencia. Se trataba de producir lo necesario para alimentar la familia y reducir los gastos a lo inexcusable. Ya poco queda de aquella economía basada en el cultivo de centeno, nabos, patatas, habichuelas y castañas de secano y en el ganado cabrío, vacuno y de cerdo del siglo pasado. Actualmente el cultivo del cerezo puede considerarse la base de la economía de Piornal, además del castaño, el olivo y la frambuesa.

El piornalego siempre ha tenido fama de persona ahorrativa, cosa que estos últimos años se podría cuestionarse ya que hay una tendencia muy acusada a invertir en fincas en las zonas de Pasarón, Jaraíz y otros pueblos de la Vera.

Así quedaría aproximadamente el año laboral del piornalego medio:

De enero a marzo

- Preparación de huertos para la economía de subsistencia: patatas, legumbres, etc.

- Preparación de los huertos de cerezos.

- Limpieza de castaños.

Abril y mayo

- Tratamiento de cerezo contra parásitos.

- Preparación de huertos de frambuesa.

- Inicio de la recolección de cerezas.

- Algunas familias se desplazan a la Vera para el trabajo del espárrago.

De mayo a agosto

- Recolección de cerezas y frambuesas.

Agosto y septiembre

- Recolección de frambuesas.

- Recogida de productos de huerta.

Octubre

- Recolección de frambuesas, castañas y aceitunas de verdeo.

Noviembre

- Finalización de recogida de frambuesas y castañas.

- Preparación de huertos de frutales (abonado, estercolado, etc)

Diciembre

- Recogida de aceitunas para aceite.

 

 

Ruta a pie desde Piornal-Mojón Blanco-Cascada del Caozo (22 kilómetros)

Iniciaremos nuestra ruta en la Plaza de las Eras, en el municipio de Piornal, a 1163 metros, y ascenderemos durante unos 5 kilómetros por la Sierra de la Jurre (parte alta de la sierra de San Bernabé o estribación occidental de Gredos) hasta alcanzar el Mojón Blanco - vértice geodésico a 1408 metros-. Desde allí divisaremos (si la climatología lo permite) toda la Penillanura del Tajo, que comienza en la Plataforma de la Vera y finaliza en los Montes de Toledo, con la comarca de las Villuercas y sierras de Cañaveral y San Pedro al fondo.

En nuestro ascenso podremos contemplar el emplazamiento a solana de Piornal, en lo alto, pero sobre una mesetilla reguardada de los vientos fríos del norte y ascenderemos desde los robledales al piso inarbolado de piornos y brezales que colonizan la parte más elevada de la sierra.

Tras una breve parada iniciaremos el descenso hacia el paraje de los Helechares y Oliva Martín. Haremos un breve alto para reponer fuerzas y llenar las cantimploras. Rememoraremos la legendaria historia de la Serrana de la Vera, que agazapada entre estas rocas esperaba a los caminantes que pasaban de la Vera al Valle del Jerte por estos parajes.

El camino, pese a discurrir por los altos de la sierra, no nos cansará pues la larga historia geológica del Sistema Central ha originado superficies de erosión muy desgastadas, de cumbres fáciles de recorrer, entre matorrales de altura -llamados piornales o lugares de piornos- surcados por algún que otro rebollar, castañares y los de otro tiempo prados de altura, hoy roturados para el cultivo de frambuesas.

Pasado el paraje de la Cueva de la Serrana, tras un breve recorrido de pista asfaltada, tomaremos el camino de los Llanos. Frente a nosotros, muy cercana, la roca majestuosa de Peña Negra se asoma al Valle del Jerte, pero dejaremos su ascenso para otro momento. En las primeras praderas que se abran en el paraje de los Llanos, y ahora entre robledales, haremos el descanso para comer. Los más avezados podrán asomarse al Balcón del Pinar de los Llanos para divisar y fotografiar el Valle del Jerte.

Tras el descanso de la comida nuestra marcha discurrirá en bajada suave hacia la Garganta Bohonal, en nuestro recorrido por el robledal aparecerán las laderas abancaladas del Valle de la Cereza. Contemplaremos el fondo del valle, el rio Jerte y su pantano, los pueblos en la ladera y su cierre final en Plasencia.

Por último, a través de un tramo del Camino Real, empedrado para favorecer el movimiento de animales de carga en su ascenso a Piornal desde Navaconcejo, alcanzaremos la Garganta Bohonal, nos aproximaremos a la antigua fábrica de la luz que abastecía durante un par de horas de iluminación al pueblo al atardecer, antes de la electrificación general.

Aquí descansaremos contemplando la caída de agua y, tras volver sobre nuestros pasos al Camino Real, nos dirigiremos a la Cascada del Caozo, aguas abajo en la misma garganta donde finalizaremos la ruta.

Enlaces para visualizar el recorrido y perfil de la ruta:

Piornal-Mojón Blanco-Helechares http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=1974556

Helechares-Caozo http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=2756272

 
Volver a Más...
 
 
 

Carta Si quieres escribirme: victor@piornal.net                                                    Página inicial


© Víctor A. Díaz Calle. 1997-2012