En Piornal existe la costumbre de forrar las fachadas de las casas con unas planchas de aluminio que aíslan a sus inquilinos del frío y la humedad. Son tan bajas las temperaturas en el pueblo más alto de Extremadura, que se lleva años haciendo. Desde siempre prácticamente a pesar del negativo resultado estético que se consigue con ello.

El Ayuntamiento, sin embargo, quiere que el municipio luzca en mejores condiciones, de manera que se acaba de firmar un convenio con la Universidad de Sevilla que hará posible que los alumnos de su facultad de Bellas Artes se encarguen de tapar las placas con murales de motivos propios de la comarca. De esta manera, se podrá ver a Jarramplas recibiendo una batalla de nabos justo debajo de algún tejado, mientras que otras viviendas se decorarán con una garganta o un paisaje de cerezos, por citar algunos de los ejemplos que enumera el alcalde Ernesto Agudiez, promotor de esta iniciativa.

«Conseguiremos una mejora estética que además se aprovechará como reclamo turístico del pueblo, para que la gente venga en cualquier momento del año con la excusa de ver las fachadas». Para ello se diseñarán rutas por el pueblo.

Las dos primeras casas se van a pintar este verano, probablemente a lo largo del mes de julio, mientras que la ornamentación de otra decena se va a repartir entre el año que viene y el siguiente. Antes se va a convocar una reunión en la que se mostrarán los bocetos a los vecinos con el fin de que les den su visto bueno.

Se va a prohibir

Es el primer paso para acabar con las antiestéticas chapas sobre las fachadas piornalegas. El siguiente será prohibir su colocación, un aspecto que se incluirá en la redacción de las nuevas normas subsidiarias que tendrán vigencia en el municipio.

El acuerdo se ha establecido con la Universidad de Sevilla en primer lugar porque tiene facultad de Bellas Artes y en segundo porque un piornalego que trabaja allí apuntó esta posibilidad. Se barajó también la cercana Salamanca, pero al final pudo más el tirón del paisano.