Canción al Cristo
 
 

Tesis Doctoral
"El folklore de Piornal: estudio analítico
musical y planteamiento didáctico"

presentada en Cáceres, el 29-5-2000, por
Rosario Guerra Iglesias

El día 15 de septiembre se celebra la fiesta del Cristo, y en su Misa Mayor se canta la Rosca correspondiente, una de las más curiosas y antiguas composiciones conocidas en Piornal.

No podemos pasar por alto, el importante componente musical de la tarde del día 15, con la ofrenda de las Cuartillas. Ese día, poco después de la sobremesa, un tamborilero con su flauta y tamboril, acompaña a las mujeres que realizan la ofrenda, desde la casa de éstas hasta la Plaza de la Iglesia, continuando sus sones aún después de la subasta pertinente. Estas últimas son tonadas que invitan al baile, siendo siempre melodías populares extremeñas.

209.- Rosca del Cristo

La exaltación de la Cruz
se celebra en este día,
celebradla todo el pueblo
con aplausos y alegría,
pidiendo la protección
a nuestra Madre María.

Llenas hoy de gratitud
a tus altares volvemos
a proclamar la grandeza
de Jesús el Nazareno,
a cantar tus alabanzas,
tus favores y consuelos.

Lecho florido de amor
árbol de alegría y vida,
que a meditar nos convida
la muerte del redentor;
grabada quiero llevarte
dentro de mi corazón.

Vais, Jesús, tranquilo a orar
por la gracia arrebatado,
vuestra sangre a derramar
por el hombre y sus pecados,
¡Oh mi divino Señor!
afligido y angustiado.

¡Oh mi Jesús!, quién te puso
en la cima del Calvario
dónde morir por Él
pendiente en tres duros clavos
con mortales agonías
de dolores traspasados.

Como si fuera un ladrón
llevaban a Jesucristo
y su madre lastimada
iba siguiendo a su hijo.
¡Qué desconsolada iría
al verle tan afligido!.

Llevan a Jesús Divino
con la soga en la garganta
sus ojos hechos dos fuentes
la túnica ensangrentada
y cual Cordero Divino
al Calvario le llevaban.

Sangrienta barba y cabello
lleva la Luz Soberana,
desnudo de pies y piernas
dos ladrones le acompañan.
Llévanos Señor al cielo
a cantar tus alabanzas.

Esas hermosas rodillas
son dos claveles morados
de caídas que le dieron
aquellos judíos malvados
que con horribles blasfemias
por el suelo le arrastraron.

Cayó por primera vez
nuestro Divino señor,
con trabajo y sentimiento
otra vez la Cruz cargó.
¡Qué penas y qué tormentos
padecería el Redentor!.

No hay quien le ayude a llevar
el madero tan pesado,
llevaba los hombros negros,
los huesos desencajados.
De sangre, arroyos corrían,
cuando a Jesús desnudaron.

Le tendieron en la Cruz
pies y manos le clavaron,
y no alcanzando al barreno
todos de los pies tiraron,
y aumentando los tormentos
los clavos le traspasaron.

¡Oh! cinco llagas preciosas
que crueles te traspasaron,
¡Oh! frente pura y divina
con espinas coronadas,
lanzada de tu costado
que fuente divina mana.

¡Oh! qué pecadores somos
Dios eterno y soberano,
sin mirar que nuestras culpas
os tienen crucificado
en ese santo madero,
vuestra sangre derramando.

Perdón, Señor, te pedimos.
Perdón, Señor te imploramos.
Perdón, por todo este pueblo
nosotros te suplicamos.
¡Oh, mi Divino Jesús!
por todos crucificado.

Los enfermos, los soldados,
los presos, los afligidos.
Todo el pueblo muy de veras
a vos pedimos auxilio
y tráenos la paz al mundo
misericordioso Cristo.

De vuestra hermosa presencia
nos despedimos, Señor,
muy alegres y contentas,
cumplimos nuestra misión.

Desde el Reino de los Cielos
échanos tu bendición.

Cuando no llovía:

Agua te pedimos Señor
aunque no la merezcamos,
que si por merecer fuera
ni la tierra que pisamos,
agua pedimos Señor
para regar nuestros campos.

Venimos a darte gracias
hermoso Cristo bendito,
nos has regado los campos
con tu poder infinito,
te lo pedimos de veras
y tú no lo has concedido.

Cuando se van a la mili:

Cuántas madres te acompañan
porque tienen a sus hijos
en los campos de batalla
pasando tantos martirios,
devuélvelos pronto a sus casas,
hermoso Cristo bendito.

Te piden con gran deseo
y sin dejar de llorar
que le devuelvas a su hijo
con toda felicidad,
hermoso Cristo bendito
no los desampararás.

 
 

Nota: Final hablado: ¡Viva el Cristo bendito! ¡Viva!

Informantes: G. C. José Vicente Calle, G. C. Miguel María Cruz. Juan de Mata Toribio. G. D. Misa septiembre 90. Inmaculada Díaz Rama. G.D. Misa septiembre 97

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© Víctor A. Díaz Calle. 1997-2002